SINCERIDAD ANTE TODO.

El otro día, andando por la calle me encontré con una pareja de testigos de esos, intenté esquivarlos como en otras ocasiones, pero debieron verme la intención y no teniendo en ese momento otra víctima a la vista, vinieron directos a mí. 
─ Perdone. ¿Tiene un minuto? ─ me preguntó uno de ellos.
─ Claro ─ conteste suspicaz, entrecerrando un ojo y pensando que podría ser divertido.
─  ¿Se ha preguntado alguna vez a donde vamos, de donde venimos y cual es el sentido de la vida?
─ Supongo que como todo el mundo, pero al final decidí buscar mis propias respuestas y ahora mismo, todo eso me trae bastante sin cuidado.
─ Comprendo, verá aquí en este pequeño panfleto que tengo en mis manos, puede encontrar una dirección de internet,en la cual encontrará las respuestas que da la biblia sobre todos estos temas. ¡Ya verá como no se aburre!
 ─ Si me lo queréis dar vosotros mismos, pero no lo voy a leer, dudo mucho que visite dicha página web y lo más probable es que vuestro bonito panfleto termine en la papelera más próxima o en un contenedor de reciclaje de papel, que hay que ser ecologistas y mantener las calles limpias y todo eso; así que vosotros mismos.
 ─ En ese caso nada caballero, gracias por su sinceridad y que tenga un buen día.
─ Nada, adiós, buenos días y a cascarla.
Bale, bale, la conversación no fue estrictamente a así, pero que queréis había que hacerla un poco más entretenida. jejeje

Jotacé