─ Ambros apenas llegó un par de
minutos antes que las autoridades, nos detuvieron a todos, incluido a
él. Pero los conocimientos de Ambros, les interesaban demasiado a
las autoridades y le obligaron a hacer un trato a cambio de respetar
nuestras vidas… lo siento ─ empezó a relatar Cesar mirando con
cierta tristeza a María y a Adrián. ─ Por suerte para mi,
nosotros también teníamos gente infiltrada y simpatizantes en aquel
sistema corrupto y mi estancia en prisión fue corta. A todos los que
detuvieron nos apartaron del proyecto de la ciudad subterránea por
seguridad, así que traté de dar con Ambros, pero a él lo tenían
aislado para obligarle a trabajar para el sistema; también traté
de dar con vosotros pero parecía que se os había tragado la tierra…
quien me iba a decir que literalmente hablando ─ dijo con una
triste sonrisa. ─ Cuando finalmente me di por vencido, mi prioridad
fue la de desenmascarar al traidor. Lo descubrí, pero a veces las
cosas no son lo que parecen… ─ antes de continuar, Cesar con
expresión seria desvió su mirada a Casandra ─… Un amigo perdió
la vida, salvando la mía, ese hombre era tú padre Cas… que te
encontrara y te adoptara como si fueras mi propia hija no fue
casualidad…
─…Pe… pero mi padre… había muerto
antes de que yo naciera, eso es lo que me dijeron en el orfanato… ─
dijo un tanto afectada Casandra.
─ No, tu madre murió enferma
por no poder recibir el tratamiento adecuado a su enfermedad y tu
padre se unió a nuestra organización… pero lo descubrieron y le
obligaron a colaborar con el mismo sistema contra el que luchaba
usándote a ti para coaccionarlo…
─ Pero
entonces…
─ Tú no tienes la culpa de nada, te
utilizaron sin que fueras consciente, igual que usaron a tu padre…
él siempre trató de dar evasivas o información de poca
importancia, hasta que lo presionaron y se vio obligado a
traicionarnos… pero como ya te dije antes, terminó redimiéndose…
El resto ya es historia.
Cuando Cesar terminó de contar su relato,
todos permanecieron en silencio ante aquellas revelaciones. Casandra
se sentía especialmente afectada y su mentor la abrazó por los
hombres para reconfortarla. Adrián había mirado fascinado a
Casandra y sintió cierta envidia ante el gesto de cariño por parte
de Cesar, por un momento entre las lágrimas, Casandra le devolvió
la mirada a Adrián, que volvió la cabeza un tanto avergonzado.
─
Hay hombres que vienen del espacio para dar caza a los mutantes, ya
sean mutantes humanos o animales, yo los he visto… ─ dijo Roma
rompiendo el silencio que se había creado ─ Por eso los mutantes
odian a todos los hombres normales y no dudan en daros caza, cuando
aparece algún superviviente entre las ruinas
─ todos la miraron
fascinados ante aquella nueva revelación ─. Mi hija y yo estamos
cansadas, si pudiéramos… ─ Todos lo estamos querida. Adrián
prepara las camas. Mañana nos contarán como han llegado hasta aquí
y por qué.
─ Es una misión de rescate, pero… tienes razón,
llevamos unos días muy intensos y todos necesitamos descansar ─
afirmó Cesar levantándose de la mesa.
Adrián condujo a
los visitantes a una estancia con cuatro literas, así que roma tuvo
que dormir con su hija, cuando el joven regresó con su madre, esta
le pidió que pusiera un poco de música suave, algo que ayudara a
sus visitantes a dormir y descansar durante algunas horas, luego
revisó algunas cosas del refugio antes de ir él mismo a
descansar.
Jotacé.
Y por poco y todo se complica.
ResponderEliminarY ahora los mutantes no tienen la culpa, no toda la culpa, de su conducta con los humanos. Sino otros humanos, que al cazarlos, incentivaron su odio.
ResponderEliminarInteresante giro.
¿Que es del personaje que originalmente parecía el protagonista? Me refiero al que huyó, dejando a sus rescatadores.
De momento Arturo ha regresado al sitio del que salió, que es el mismo al que se dirigen el resto de personajes. Pronto sabremos de él.
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