viernes, 29 de julio de 2011

Siniestro Total . Viene El Verano. 1986.avi

A UN PASO DEL INFINITO I: LA EVOLUCIÓN DEL HOMBRE (C.J. León)


Hace miles de años una nave espacial secuestra un hombre prehistórico de la Tierra, y lo transporta, luego de evolucionarlo en físico e inteligencia, hacia un mundo llamado Tornelia, allí deberá pasar una prueba para conocer si es el elegido en llevar hasta el infinito, una sustancia que está a punto de originar un nuevo universo. Para ello tendrá que armar un artefacto que le permita desplazarse por el tiempo y el espacio. Las partes de ese artefacto están distribuidas en 7 planetas de 7 galaxias distintas. Dos razas sabias del universo se enfrentan por la sustancia y el hombre en medio deberá luchar por hacer lo justo. Un Maestro Guía de millones de años, una soldado aguerrida y la misma nave serán sus compañeros de aventuras. Esta es la primera historia de una serie de tres que narra las aventuras de Orgg de Bonn, el hombre de la Tierra que intentará salvar el Universo.

lunes, 25 de julio de 2011

EL SUEÑO DE LOS CINCO TOTEMS RÚNICOS (By Matías Krasner)

Un compañero que ha pedido que le publique uno de sus relatos en mi blog, así que he decidido tomarme un descaso...
elcuentahistorias se enorgullece en presantar una historia épica, escrita por MATÍAS KRASNER:




En la oscuridad de la noche. Tranquilizado por el canto susurrante de la lluvia, mientras las gotas golpean suavemente la ventana de mi habitación. Los pensamientos manan de mi interior. La duermevela da paso a una respiración lenta, sin prisa, expirando levemente. Suelto el aire que da paso a un sueño placido y reconfortante. Mis latidos, vienen y van. Subiendo el tono, hasta dar comienzo, los atronadores tambores de guerra que resuenan en el valle. Mientras las hordas enemigas caminan desafiantes. El cuerno resuena en la lejanía, acompañando los gritos del campo batalla. Mi alma de guerrero despierta. Mi mano izquierda que antes estaba desnuda, ahora lleva el acero de la espada corta. Levantándola con fiereza, chocándola contra el escudo, entonando la canción guerrera de mis ancestros.

La nieve cae delicadamente entre mis cabellos rojizos. La rabia entra en mí ser, el tótem de las cinco bestias que anidan en mi interior. Despertando la furia del berseker. El águila que sobrevuela el cielo, la serpiente que se arrastra y ahoga. El lince que sigilosamente se mueve entre las rocas esperando su presa en silencio. El lobo fiel y astuto, que acecha con sus camaradas y se envían miradas llenas de complicidad. El cuervo que grazna posado en una rama, observando los movimientos del enemigo. La sabiduría ancestral que me llena de energía, los arboles que se mecen por el viento. La tormenta eléctrica, señal que Thor espera anhelante, nuestra victoria. Los rayos y relámpagos iluminan el cielo. Por la voluntad del dios furioso, destructor y creador al mismo tiempo.

Los cantos de guerra continúan, los choques contra los escudos resuenan, entonando la canción de muerte, levantando las espadas al cielo, saludando a los dioses de la guerra. La barrera de hombres se va acercando, sin prisa, saboreando cada momento. Esperando que el enemigo se acobarde. Los gritos se acentúan, los escudos chocan violentamente. Las espadas arremeten contra la carne, como mordiscos de colmillos. Las garras aprisionan, desgarrando a la presa y los aullidos del hombre caído erizan mi piel. Miles de muertos caen a nuestros pies, pisando sus entrañas, batallando sin compasión. La sangre de mis enemigos baña mi rostro, dándome un aspecto amenazador.

La aurora boreal se abre camino en el cielo, las almas de los caídos serán transportadas por las que eligen, bellas criaturas portadoras de honor.

Lucharan de nuevo en los salones del Valhalla. Representando su caída hasta el día del ocaso de los dioses.

Pero mi final aún no ha llegado, descargo potentes estocadas que hieren el brazo y el pecho de mi adversario. El colmillo sigue mordiendo la carne, absorbiendo su sangre. Robándole la vida sin demora, otorgándole el derecho a sujetar su espada, y que el alma viaje con honor, hasta que Odín decida que nos encontremos en la otra vida, para formar parte de su ejército y luchar mano a mano contra los gigantes en la última gran batalla…



En mi sopor, mi cuerpo convulsiona. De repente el sueño cambia. Ya no me encuentro en la batalla. Ahora vago solitario por los montes helados.

Mis sentidos agudizados, mi pelaje rojo con puntos negros. Mojado por las recientes nevadas. Sigilosamente salto a las rocas, olisqueando el rastro de una presa dentro de mi territorio.

El viento acaricia mi rostro, deleitándome con distintos olores perfumados, de los pinos que hay a mi alrededor. Mi corazón late deprisa, mi calor corporal es mayor, aguantando el frio invernal. Los canturreos de los pájaros se escuchan con más nitidez. Una liebre rasca un agujero a lo lejos. Me pongo alerta, es mi primera presa en varios días; la escasez del invierno hace que este hambriento. Con sigilo me agazapo entre los matorrales y mi mirada siempre fija en la liebre, que ajeno al peligro sigue rascando el hoyo nevado. Ahora es mi turno. Me muevo lentamente, unos pocos metros. Acercándome y escuchando los latidos rápidos de mi presa, mientras mira intrigada en los alrededores sintiendo el peligro que le acecha. El miedo le paraliza y olisquea el viento que arrulla. Un salto oportuno y mis mandíbulas le desgarran el cuello, mientras ella cocea indefensa. Intentando salirse de una trampa mortal. Su sangre va cayendo irremediablemente al manto blanco. Me alimento vorazmente, partiendo toda la carne posible. Me relamo satisfecho y parto sin prisa a mi lugar de descanso, para dormir y aguantar lo que queda del invierno...

Volando se encuentra mi alma, observando las maravillas del nuevo mundo. Libre de las ataduras del ser humano, que dormido se encuentra sin remedio, en un laberinto sin fin, de emociones. Grito victorioso a las nubes. Mis alas suben y bajan con energía renovada, mientras observo las pequeñas montañas abriéndose ante mí, sobrevuelo Midgard. Fiordos y pequeños ríos, gargantas profundas llenas de belleza, escondidas para el ojo del hombre. Mi voz se acentúa, planeo en círculos y veo como el manto de nieve difumina el suelo. Las rocas llenas de musgo, rodean las cadenas montañosas. El aire frio se mete en mis plumas, pero vuelo orgulloso de ser un águila. Mientras la sombra de mis alas aparecen reflejadas en las copas de las hayas, por los débiles rayos de sol.

Con un nuevo grito subo la velocidad, caigo en picado y me sumerjo en el mar azul. Las gaviotas graznan enloquecidas y se alejan de su enemigo más despiadado. Renazco de nuevo y subo al cielo rojizo, mientras dejo que mis plumas se sequen al sol. Oigo el reclamo de mi compañera, que escondida detrás del fresno me llama sin demora. Para alimentar a nuestro polluelo. Que espera ansioso nuestra llegada en el borde del nido. Y abre su pico, reclamando lo que le pertenece por derecho.

Miro al horizonte y mis sueños resurgen de nuevo. Grito eufórico y remonto el vuelo zigzagueando en el aire, mirando el árbol de la vida. Soy parte del cosmos. Soy la ley y el orden, el guerrero de los cielos que purga el caos y la oscuridad de los nueve mundos.

Fusionándome con la tierra.

La criatura convertida en la sierpe, avanzando lentamente. Arrastrándose por la superficie inexistente, mordiendo y devorando las raíces del árbol de los nueve mundos. Destruyendo sin demora, los sueños y los caminos. Discutiendo con el águila, mandando a la ardilla, con mensajes llenos de resentimiento. El miedo y el orgullo, atormentando las almas de los muertos que habitan en Hel.

Las nornas tejen los hilos de los hombres, que yo rompo con facilidad, llevando a los mortales a la locura. Gran serpiente de los nueve mares, zafándose del gran trueno, que acecha con un gran arpón, en su barco de caza, mirando en las noches fúnebres. Recordando el sueño de la calamidad de su alma. Por el veneno que nace de mis entrañas, destruyéndolo con mis colmillos.

El lobo, compañero de batallas. El amigo fiel que sigue al padre de todos. Observando los movimientos de los guerreros. Escuchando las historias de héroes, amores entre hombres y valkirias. Alimentándose de las risas, los brindis de Odín hacia los caídos y revividos por el gran hidromiel. Grandes luchadores que disfrutan de su nueva vida en los salones del valhalla. Mi hermano Geri mira satisfecho. Guardianes del gran trono, donde el señor de la sabiduría festeja. Esperando con recelo, el día que marchemos hacia la batalla y nos alimentemos de los restos de los gigantes consumidos. Mis ojos se iluminan y veo a los guerreros orgullosos, cantando grandes poemas de los Escaldos. Hablando de las sagas de nuestro amo. Cuando pasó nueve noches en el gran árbol de la vida y encontró la sabiduría de las runas, sacrificando su vida, clavándose dos lanzas en los costados sin comer ni beber hidromiel.

Allí en la oscuridad vislumbró el secreto.



Grazno en la rama del Yggdrasil y contemplo, como Odín yace colgado de los pies del gran árbol. Susurrándome en sueños. ” Recuerda hijo mío, tu eres el pensamiento de los nueve mundos y la memoria del universo que esta por renacer. Eres nuestra única esperanza para que el Ragnarok no comience. La época dorada, donde los Aesir gobiernen sin caer en el olvido. Balder hijo mío, el nombre de la ultima runa es…..”

Una última llamada silba en la oscuridad, y las palabras se desvanecen por las brumas matinales. Remonto el vuelo, hacia lo desconocido, las cataratas se estremecen con mis graznidos y me encamino a Midgard. Buscando al héroe nacido, por orden de Hrafnaguð. Rodeo montañas, valles, llegando a las cabañas de maderas en la ladera fronteriza, iluminadas por el humo de las hogueras, casi apagadas por el rocío del amanecer. Escuchando un llanto a lo lejos, sigo el recorrido, aleteando con fuerza mis alas, llevándome a mi destino.

Un niño de ojos castaños verdosos, y pelo rojizo llora desconsolado. Me poso en la ventana y pego un suave graznido intentando apaciguar su ira apesadumbrada. Abriendo los ojos levemente, sonríe y me mira, acercándose con recelo. Salto a su cabeza, canto una canción mística y le pico levemente el cabello. Él alarga la mano y me la ofrece cortésmente. Aceptando su osadía, me poso con delicadeza.

“El niño tiene la mirada perdida, pero en sus ojos veo fuerza y perseverancia. Sera un gran guerrero y sus hazañas serán cantadas por los escaldos o mejor aún, será capaz de escribirlas el mismo. Dentro de unos años no dependerá de nadie, y tendrá coraje suficiente para salir a ver mundo. El sabio tenía razón, es digno de nuestra ayuda, aunque todavía le queda mucho camino por recorrer. El corazón es fuerte y su alma grande. Sin embargo el orgullo, le jugara malas pasadas, pero con ayuda de las runas, se hará más fuerte y se conocerá así mismo.”

El niño sigue observando, acariciando con suavidad el plumaje del ave córvida, sin temor alguno y seguro de sí mismo, por el amor que procesa a los animales. Las lágrimas cesaron, y su sonrisa aflora, mientras se acerca a la ventana. Dejándome volar otra vez en libertad.

Rúnar rath rett rath (Que las runas te susurren el secreto....)

Matias Krasner

©Copyright -All rights reserved 2011

24-7-2011


EL AUTOR AGRADECE VUESTRA OPINION SOBRE EL RELATO.

LUZ DE HIELO (Oscura Forastera)




Narrative: Romántica
Yem tiene que resolver un pasado, pera vivir un presente y encontrar el amor.

Almhar y Yerhan eran grandes amigos; cenaban juntos el día 30 de diciembre, cuando Yamiem se puso de parto. Su madre Albora, y la partera del lugar la asistieron. El parto fue muy largo y duro. Por fin, el día 1 de enero de 1045, nacía la princesa, YEM- KHAY- ALF. (LUZ DE HIELO).

http://luzdehielooscuraforastera.blogspot.com/

lunes, 18 de julio de 2011

Book trailer(avance DdL)"Sueños por cumplir"

CRUCE DE CAMINOS (Marga Gil Benítez)


Como en un cruce de caminos, las vidas de los personajes de esta novela se encuentran en un punto concreto. Un detective retirado por su adicción al alcohol y sus reiterados intentos de suicidio; un abogado corrupto que siempre sale indemne; un asesino de prostitutas que trae en jaque a la policía; un anciano chino mafioso que busca a su hijo; un inspector de policía que quiere ganarse su lugar en el mundo ... Intriga a raudales y mentiras a cada paso que se da ... Un cóctel explosivo que intenta poner a cada uno en su sitio y un final sorprendente que no dejará indiferente a nadie.

(L.P. 03) UNA NOCHE EN LA EXISTENCIA DE UN VAMPIRO.


¿Qué se siente cuando se está muerto?
Nada, esa era la respuesta. A menos claro que seas un vampiro. Entonces, lo que sientes es la ausencia de eso que llamamos alma, que es la ausencia de la misma vida.
Un montón de recuerdos e ideas, se agolpan en una mente que es incapaz de sentir nada. Recuerdos de la persona que fue y que pueden ayudarle a fingir delante de los vivos, para alimentarse. Incluso, cuando llega la noche puede notarlo y su cuerpo sólido, se vuelve gaseoso, escapándose por los poros y las rendijas del nicho y vuela, dejándose llevar por el aire, hasta solidificarse en la ciudad. Donde busca a un nuevo ser del que tomar un poco de su sangre y solo le sirve la sangre de un ser vivo de su propia especie. Pero el es un vampiro muy joven y es muy poca la cantidad de sangre de la que precisa todavía.
El olor de la sangre, mezclado con el de sudor y el perfume, lo empujan a las cercanías de un bar nocturno, donde muchos jóvenes aguardan en la puerta para que les dejen entrar. Nadie se da cuenta cuando aparece directamente en la puerta. Una mirada al portero y este le hace un gesto, seguido de un “adelante”, la próxima vez, entrará directamente, sin invitación. Adentro la gente grita, para hacerse oír por encima de la música, para el resto de la gente, él es poco más que una sombra, casi imperceptible y que nadie recordará. Entonces la ve a ella y sabe que es perfecta, con su vestido negro de encajes y su excesivo maquillaje del mismo color, un poco regordeta y solitaria aunque esté con más gente. En el fondo, ella lo estaba pidiendo a gritos. Él se hizo visible tan solo para ella, que dejó a sus amigos, sin apenas despedirse.
- Me llamo Alicia. ¿Eres lo que creo que eres?
- Claro.- Dijo él, sonriendo y mostrando sus colmillos.- Llevo mucho tiempo buscándote.
- ¿Por qué soy la reencarnación de tu antigua amante?- Dijo ella.
- Si… más o menos.- Respondió él, pensando en el daño que había echo el cine y algunas novelas, dirigidas a un público femenino y adolescente.
La chica lo llevó a su casa. Él entró en el edificio cuando ella lo invitó a pasar. Un edificio lleno de gente que esporádicamente, podrían sufrir pesadillas en los próximos meses. Ella, lo condujo a su habitación, evidentemente vivía con más gente, probablemente con sus padres. Cerró la puerta y se quitó el vestido, quedándose en ropa interior. Inclinó la cabeza sonriendo, dejando ver su cuello. En vida, como Daniel había deseado que le ocurriera algo así un millón de veces, pero ahora, aquella chica, para él, era poco más que el envoltorio del preciado liquido rojo del que se tenía que alimentar. Se acercó a ella, la abrazó y le besó en el cuello succionándole la sangre, poca, pero suficiente para dejarla cansada. La chica calló a plomo, profundamente dormida en la cama y él se alejó, mientras las pequeñas heridas del cuello se cerraban. Su rostro ahora era sonrosado y parecía más vivo que la regordeta chica, que dormitaba pálida y en ropa interior en la cama.
- No me has dicho tu nombre.- Susurró ella entreabriendo los ojos.
- Los muertos, carecemos de nombre... Ahora, ¡duerme!
Ella se durmió profundamente, al día siguiente se levantaría tarde y cansada.
En los días siguientes, a Alicia se le ocurrió que tal vez su vampiro, del que ninguno de sus amigos se acordaba, se había transformado en una criatura de la noche, muy recientemente, así que decidió buscarlo en las necrológicas de los periódicos de los últimos meses, luego del año anterior y luego de dos años más tarde, ya estaba apunto de darse por vencida, cuando un día, tuvo suerte. Encontró una noticia, sobre una extraña epidemia ocurrida en un edificio de una de las ciudades de la periferia. Y cuando, vio a los muertos a causa de la epidemia, allí estaba él. Se llamaba Daniel y debía tener la misma edad que ella, cuando se convirtió en vampiro, sabía que pronto volverían a encontrarse, estaban destinados a estar juntos.
Los vampiros en general, tienen cierto poder, sobre aquellos de los que se han alimentado, pero lo que la mayoría de los vivos desconoce, es que ese poder hasta cierto punto es reciproco y por ello, sin saberlo pueden atraer con su miedo y su fascinación a esos seres de la noche y más aún cuando conocen la identidad que estos seres poseían en vida. Sabiendo esto, cualquier humano podría utilizarlo para destruir al vampiro pero… normalmente lo que podría salvarles suele condenarles. Y así es como Alicia, empezó a invocar cada vez con más frecuencia a “su vampiro” sin sospechar que eso la podía llevar a una muerte segura.

Jotacé

jueves, 14 de julio de 2011

EL LEGADO DE LA PROFECÍA 1: EL LOBO BLANCO (Abel Murillo Ramírez)


Una Profecía élfica vaticina una gran guerra en la Tierra Antigua…

Los bárbaros de los desiertos del norte han sellado sendos pactos con orcos, elfos oscuros y demás seres de oscura naturaleza, dispuestos a conquistar los reinos libres.

Los hombres están divididos, los enanos y los altos elfos asediados en sus respectivas tierras. Se impone la necesidad de buscar aliados y hacer frente a la maldad que se extiende inexorablemente.

Y, en medio de este torbellino, se encuentran un joven herrero y su huargo blanco, ajenos a lo que el destino les deparará…

¡¡¡SON LAS RADIACIONES!!!


Efectivamente. Las radiaciones emitidas por los platillos volantes que se habían colocado encima de los millones de cementerios de la Tierra, habían despertado a los muertos de sus sueños Eternos. Los Alienígenas, habían copiado la idea, todas aquellas películas sobre zombis que habían interceptado del mismo planeta.
Pero la Tierra tenía a sus protectores. Entre los que destacaban: Mr Virtud; la mujer policía zombi; El extraordinario hombre insecto o el vengador nocturno. También algunos villanos como: El payaso loco; Tentáculos o Aguijón Venenoso, que veían como la Tierra de la que se querían apoderar corría peligro, se unieron al grupo de héroes. Pronto la guerra, se extendió por todo el planeta.
Pero cuando al destruir uno de los platillos volantes, los héroes, comprobaron que los muertos volvían a su estado natural, se concentraron en las naves alienígenas, que pronto tuvieron que huir, dejando al planeta Tierra por imposible… Al menos de momento.

Jotacé

viernes, 1 de julio de 2011

LOS SILLIN Y LOS INGULLIN (José Enrrique Serrano Exposito)


La aventura de un hombre, sus sobrinos y unos seres de siete a nueve centímetros de estatura: Las tribus Elborin, que moraban en geodas.

AMOR EFIMERO


La historia de amor entre Ana y Marcos, duro menos que su huella, en forma de corazón y con sus nombres escritos, que Marcos se había encargado de dejar pintado en una pared y que ahora un encargado de la limpieza del ayuntamiento, se estaba encargando de borrar, con la ayuda de un cubo de pintura y un rodillo.

Jotacé.