jueves, 29 de septiembre de 2011

MICRORELATOS PARA CONCURSO.

Hace algún tiempo, que estoy enviando algunos microrrelatos, al concurso de microrrelatos encadenados, que la cadena SER esta realizando junto con la escuela de escritores.
Aquí os dejo los dos micros con los que he participado hasta ahora sin demasiado exito y un enlace con la web, donde se pueden encontrar las bases del concurso, por si alguién más se apunta.

Un saludo

Jotacé.





La noche es una estrella en tú cucharilla. Reflejada en una gota del café que acabas de remover y que dejas enfriar mientras el humo del cigarrillo que estás fumando asciende al cielo buscando tú estrella. De pronto, reparas en mi mirada, que por un momento se pierde en tus ojos. Giro la cabeza, incomodo al saberme descubierto, pero ahora eres tú la que no me quitas ojo y cuando te miro, me sonríes y tus ojos brillan con el reflejo de la estrella que tienes en la cucharilla. Ahora tú eres la noche que deseo, dure para siempre estrella.




Tú y yo podremos pasear juntos bajo ese cielo estrellado, hablaremos y nos conoceremos. Cuando lleguemos a la playa correremos hasta el mar y nos bañaremos desnudos, bajo la luz de la luna. Nos amaremos encima de la suave arena y finalmente veremos el amanecer, abrazados uno junto al otro, dándole los buenos días al futuro.



viernes, 23 de septiembre de 2011

VIAJE SIN RETORNO (Antonio Lagares)


Sinopsis
A mediados de siglo XX, la psicología evolutiva está en auge por motivado por sus terapias de modificación de conducta. Este tipo de experimentos llega a todos los centros en donde hay individuos con ciertos problemas de adaptación social.
En un centro de menores de Barcelona, deciden poner en marcha una de estas terapias experimentales, convirtiéndose en la pionera en España en realizarlo exclusivamente con internos conflictivos. Efectuará un intercambio temporal con otro interno de un centro de Cádiz. Ante la incertidumbre del resultado de estas terapias aun desconocidas, proponen que ésta primera se mantenga en total secreto hasta comprobar el resultado final.
El interno elegido es el más conflictivo de todos, y para su traslado en taxi, buscan un perfil muy concreto, una persona que en caso de problemas extremos, su ausencia no tenga repercusión mediática.
En el transcurso del viaje se suceden los incidentes de forma continua, sobre todo por el choque de personalidad existente entre el taxista y el interno. El desenlace final, aunque esperado, no deja de sorprender a nadie.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

(L.P.05) DIANA



Mónica, notó que algo había cambiado en el carácter de Elena, desde que fue al cine con Santi y se alegraba por ello. Santi, tenía algo extrañamente familiar. Así que cuando se presentó nuevamente en busca de Elena, en un primer momento se alegro, hasta que se entero, que era lo que se proponían.
- Vais otra vez al cine.- Dijo sonriendo.
- No. Hemos quedado con el hermano cura de Santi. Tiene amigos policías que nos pueden informar de lo que se sabe de la muerte de Andrés.
- ¡¿No lo dirás en serio…?!
- Hasta luego hermanita.- Dijo Elena cerrando la puerta tras de si.
Mónica intentó detenerlos, pero acababa de salir de la ducha y perseguir a alguien con una toalla como única vestimenta, daría que hablar en la escalera, así que se vistió lo más rápido que pudo y fue a pedirle cuentas al único que en ese momento se le ocurría, Jota. Subió las escaleras de dos en dos y dio dos grandes timbrazos a la puerta.
- Hola Mónica.- Dijo Jota con una sonrisa en los labios, sonrisa que se desvaneció al ver la cara de enfado de Mónica.- ¡Haber que he hecho ahora!
- ¡¿Sabes a donde ha ido mi hermana con tú amigo?!
- Pues… no tengo ni idea.
- A ver a no se que cura, que tiene información de la muerte de Andrés.
- No lo sabía, ¿pero que quieres que haga?
- Pues que hables con él, no quiero que meta a mi hermana en líos.
- Está bien, ya se lo diré, cuando venga.- Dijo Jota.
En ese momento, se abrió la puerta del ascensor y de allí salió una chica morena, con el pelo un poco más largo que Mónica, aunque de estatura un poco más baja, pero a la vez era más fibrosa y enérgica, vestía tejanos, camiseta y cazadora, y sobre su espalda llevaba una enorme mochila.
- ¿Interrumpo algo? – Les preguntó, con un extraño acento.
- ¡Diana! – Dijo jota, sorprendido.
Se abrazaron y Diana le dio un beso en los labios. Mónica tuvo una repentina punzada de celos, que reprimió como pudo, pensando que era una estúpida al sentirse así, cuando había sido ella la que siempre había mantenido las distancias.
- Diana, una vieja amiga. Mónica mi vecina.- Dijo Jota haciendo las presentaciones.
- Valla… Pues a mi no me parece tan vieja.- Dijo Mónica con cierta ironía.
- Gracias.- Respondió Diana.
- Bueno, será mejor que me marche. ¡Ah! Y acuérdate de eso que hemos hablado antes.- Dijo Mónica antes de irse.
Jota hizo pasar a Diana dentro.
- ¿Qué te trae por aquí?
- ¿Es que no puedo venir a ver a un viejo amigo? Por cierto… ¿Seguro que no hay nada entre tu vecina y tú?
- Solo somos amigos
- Entonces… ¿Qué te parece si me instalo unos días con tigo?- Dijo, Diana sonriendo malévolamente.
- No se si te refieres, al piso o a la habitación, por que ahora mismo, la otra habitación la tengo ocupada… A si que…
- ¿En serio? ¿No molestare?
- No, no. Es Santí. No se si llegaste a conocerlo. Era amigo de Daniel.
Diana, sonrió, Entró en la habitación de Jota, con la mochila. Cuando salió al cavo de unos minutos, lo hizo vestida solo con una toalla y llevaba un neceser en la mano.
- Si no te importa, voy a darme una ducha. – Dijo, dirigiéndose al cuarto de baño.- ¿Puedes venir a frotarme la espalda?
- Si claro.- Contestó Jota, desvistiéndose, mientras seguía a Diana.
Esa noche fueron a cenar, para recuperar fuerzas y recordar viejos tiempos.
Diana, pertenecía a una especie de organización secreta, anarquista y pacifista, que se dedicaba a recorrer el mundo, cambiando siempre de identidad. Nadie poseía nada, pero todo era de todos. Todos los miembros, entre los que había familias enteras se ocupaban de cosas que ayudaran al bien común, no solo de los miembros de la organización, también del resto de la gente, eso si, todas las ganancias eran destinadas a una cuenta a la que, todos los miembros tenían acceso. En sus viajes, Diana había conocido y aprendido todo tipo de cosas. Ella era uno de los miembros que se dedicaba a estudiar, los fenómenos supuestamente sobrenaturales y en uno de esos casos, fue como conoció a Jota.
Cuando regresaron a casa, Santi ya había regresado de su investigación con Elena y Jota hizo las presentaciones pertinentes.
- Por cierto, Mónica me ha dicho que no metas a su hermana en líos.- Le dijo Jota como de pasada.
- ¿Qué tipo de “líos”? ¿No quiere que salgáis juntos o algo así? – Preguntó Diana.
- No es eso, Elena quiere averiguar quien mató a su novio, y yo le dije que mi hermano, que es cura, conoce a gente de la policía.- Explicó Santi.
Esa noche, se acostaron tarde, Diana estaba cansada y después de retozar aquella tarde en la ducha, decidieron que ya tendrían tiempo para el sexo al día siguiente. Pero al cavo de una hora, Jota sintió como Diana se incorporaba a su lado.
- Hola Dani, o lo que seas. ¿No habrás venido a alimentarte, verdad? Aunque parece que no te hace mucha falta.
- Hola Diana, si estuviera vivo, me alegraría de verte.
- ¡Daniel! ¡¿Qué estás haciendo aquí?! Creía que, no ibas a volver…- Dijo Jota incorporándose, también.
Daniel, parecía más vivo que antes de morir, con su rostro, redondo y rojo como un tomate.
- Necesito vuestra ayuda.


Jotacé

viernes, 16 de septiembre de 2011

QUINOX 2: LAS PIEDRAS DE LA DECADENCIA (Carlos Moreno Martín)



El día que Tom Randall regresa a Raven City, después de cinco años, ni imagina que su vida está a punto de cambiar de nuevo. Un extraño asesino ha matado a un hombre y está dispuesto a continuar dejando un rastro de sangre en la ciudad. Tom es acusado injustamente y se decidirá a limpiar su nombre. Acompañado por la bella y enigmática Llama blanca, Randall intentará averiguar las razones que llevan al psicópata a hacer lo que ha...ce. Algo que le llevará inexorablemente hacia unas respuestas que él no había buscado.
Al mismo tiempo, en la cárcel de Las Vegas, Pete "El rompehuesos" Reinolds ve cómo su compañero de celda escribe extraños símbolos en la pared. Símbolos que le llaman, que le atraen...
Los agentes David Dean y Richard Bryan le interrogan sobre el paradero y la identidad de Tom Randall. Sin embargo, algo terrorífico sucede y Randall pasa a un segundo plano.
Poco a poco, las fichas de este tremendo tablero de ajedrez van tomando posiciones, a la vez que Tom Randall se acerca a su destino: convertirse en el héroe que debe ser.

Si queréis más información sobre la Saga Quinox visitad: http://sagaquinox.blogspot.com/

(Dr. P y Mr. V) SOLEDAD


Tras la invasión, el Dc. Perverso estaba decidido a terminar con su archienemigo, Mr Virtud, pero siempre surgía alguna emergencia en alguna parte, que lo hacía resurgir, sin la necesidad de la fórmula.
Tampoco, para Mr Virtud, como defensor de la humanidad, la cosa resultaba fácil y a pesar de sus super poderes, estaba al borde del agotamiento, así que decidió hacer su personal fortaleza de la soledad. Pero quien quiere estar solo en un lugar tan gélido, como el polo norte, cuando en el océano Pacífico habían tan maravillosas y paradisíacas islas desiertas, donde tal vez, Dc Perverso, podría vivir en paz, con sus experimentos y sin hacerle daño a nadie y el mundo aprendía a vivir sin su salvador.
Continuara…

Jotacé.

jueves, 15 de septiembre de 2011

REALIDAD Vs INMORTALIDAD (Moisés A. Brador)


“Realidad Vs. Inmortalidad”

“Realidad Vs. Inmortalidad” es un libro de preguntas y cuestionamientos que aparecen en la vida individual como reflejo de las incertidumbres propias de la humanidad respecto de la contradicción entre la finitud de su existencia que se señala la experiencia de la muerte y la fuerte idealización narcisista que lleva al hombre a considerarse y a vivir como si fuera inmortal.

jueves, 8 de septiembre de 2011

COMO ESTÁ EL PATIO.


Aquella semana, había sido un tanto extraña, tal vez eran los efectos de aquella crisis, que duraba ya demasiado tiempo, para empezar a su chica que había ido a comer a la casa de una amiga, la cual vive en una urbanización, aparentemente muy segura, le robaron la bolsa donde llevaba media vida consigo. El portátil, con todos los trabajos de la universidad, la documentación, medicamentos y algún que otro móvil. Apenas habían dejado el coche solo, un par de horas, pero al volver, la ventanilla estaba rota. Como quien dice le habían robado media vida.
El viernes por la mañana, antes de que amaneciera, él que había dejado de ir al trabajo en coche, para ahorrar algo de dinero, al pasar andando por la estación de tren, un chico joven que en ese momento salía y que probablemente ni siquiera se había acostado todavía, le pregunto si le dejaba un euro para tomarse un café.
- ¡¿Qué te “deje”?!- Preguntó.- Para empezar, no tengo un euro para tomarme yo un café y menos para “dejártelo” a ti.- Dijo haciendo el símbolo de las comillas.- Pero suponiendo que lo tuviera y te lo “dejara” ¿Cuándo pensabas devolvérmelo si no te conozco de nada? Claro que quien se va a preocupar un simple euro ¿verdad?
- Mira tío, si no me lo quieres dejar no me lo dejes, pero deja de darme la brasa.- Contestó el chico dando media vuelta para buscar a otra “alma caritativa”.
Pero el colmo, fue aquella misma noche, cuando después de tomarse una cerveza con un amigo, al regresar este a su casa, nuestro protagonista lo acompañó un trecho del camina y parados ya y despidiéndose asta otro momento, vio como su amigo se ponía a la defensiva.
-¿Qué quieres?- Le preguntó a un chico joven que se acercaba por la espalda.
El chico estaba visiblemente ido, tal vez por el alcohol o por alguna otra sustancia.
- ¿Quieres pasar? – Preguntó el haciéndose a un lado.
- No.
- Entonces.- Preguntó el amigo.
- Quiero ir con vosotros.- Contesto el chico
- ¿Con nosotros? Nosotros no vamos a ninguna parte, nos estamos despidiendo.
El chico, desilusionado, dio media vuelta y se fue, con su borrachera y sus pantalones caídos.
- Joder tío, como está el patio.- Le dijo a su amigo antes de despedirse.

martes, 6 de septiembre de 2011

UN MUNDO POR DESCUBRIR (Itsy Pozuelo)


Un mundo por descubrir es la historia de una joven cantante Llamada Zoe, que se ve envuelta en un mundo totalmente diferente al suyo al descubrir las muertes de dos de sus familiares.

En su lucha por encontrar al asesino,se cruzará con el amor de su vida, buenas amigas y muchas sorpresas.

Su vida se convertirá en misterio, dolor,amor, magia y muerte.

lunes, 5 de septiembre de 2011

PERDIDO EN ÚLTIMA FRONTERA.


Teóricamente ningún robot, tiene incluido el robo o el hurto en su programación y mucho menos los que están diseñados para proporcionar placer. Pero aquel androide de proporciones aparentemente perfectas, había sido reprogramada por un amo con muy malas intenciones, tanto es así que arrastró al pobre Jey a una trampa en la zona más peligrosa de la estación espacial.
Aquello, le pasaba por desobedecer a todo el mundo, desde a la tripulación del crucero turístico, hasta al androide guía. Pero claro, el quería ver la auténtica cara de una de aquellas míticas y pioneras estaciones Última Frontera, aparte de la zona que se les mostraba a los turistas como él. Quería conocer a aquellos aventureros que saltaban de una a otra estrella, esquivando un montón de peligros.
- ¡Ey chaval!- Se te ve perdido.- Dijo una voz de mujer a su espalda.
Era una chica menuda, pero bien formada, con el pelo corto y un mono de trabajo, que le daba un aspecto descuidado.
- Si, bueno, estoy buscando un centro de información. Una androide sexual, me ha robado todo lo que tenía, incluido el plano de la estación espacial y ahora no se como volver al hotel y lo que es peor, tampoco encuentro guardias de seguridad o alguien de quien me pueda fiar.
- Así, que te han robado y no tienes con que pagarme si te indico el camino de vuelta.
- ¡¿Pagarte?! ¿Por indicarme el camino de vuelta?
- Claro monada, la vida está muy complicada, últimamente. Además, por esta zona no se atreven a adentrarse las fuerzas de la ley.
- Supongo que cuando lleguemos al hotel y resuelva mi situación…
En ese momento, Jay vio, al androide que le había robado. Iba acompañada por un siniestro individuo de casi dos metros, pero Jay, lo único que vio era a otra víctima potencial de aquella maquina ladrona.
- ¡Ey tú!- Gritó Jay mientras corría hacia la androide.
- ¿Qué pasa con tigo chaval?- Preguntó el tipo mal encarado.
- ¡Esa androide sexual, me ha robado, todo lo que llevaba encima!
- ¿Ah sí? Pues resulta que yo soy su dueño y si la acusas a ella me acusas a mi.- Dijo el hombre sacando un enorme cuchillo.
- Bueno, en realidad… ahora que lo pienso, no estoy tan seguro que fuera ella.- Dijo Jay ante su metedura de pata.
- ¿En serio? Pues hace un momento si parecías bastante seguro.- Dijo el hombre acercándose amenazadoramente.
- Aquí, no admitimos embusteros y difamadores.- Dijo otro hombre que se puso al lado del primero
De pronto, se encontró un buen número de hombres del espacio dispuestos a darle una paliza, solo por diversión. Alguien detrás de él, le agarro de la mano y le dijo al oído:
- Corre.
Aquello le fue como el resorte que le hizo reaccionar.
Entraron en un gran almacén, lleno de enormes contenedores, que parecían formar un enorme laberinto. La chica sin soltarle la mano, le condujo por los pasillos, hasta que vio, un contenedor, que estaba entre abierto. La chica empujó a Jay, al interior del contenedor, entrando ella detrás y volviéndolo a cerrar.
Dentro estaba muy oscuro y estrecho.
Jay, quiso preguntarle, la razón por la que le ayudaba, pero ella le tapó la boca.
Afuera las voces de sus perseguidores, siguieron durante un rato, buscando infructuosamente los pasillos de aquel laberinto de contenedores. Cuando por fin cesaron, el volvió a preguntarle la razón de su ayuda y ella en respuesta, le plantó un beso en los labios.
- Esa, me parece una buena razón.- Dijo Jay.
- Calla, le dijo ella, mientras volvía a besarlo a la vez que le desabrochaba la camisa. Se desnudaron mutuamente, en aquél estrecho compartimento, sin dejar de besarse y de acariciarse y sin ser conscientes de que afuera en el almacén, los robots obreros estaban cogiendo cuidadosamente aquel contenedor, junto con otros cuantos y subiéndolos a bordo de un enorme carguero.
Estuvieron, dos o tres horas, amándose sin importarles, nada de lo que pudiera ocurrir en el interior e incluso cuando terminaron, Jay seguía acariciando la suave piel de su salvadora, hasta que de pronto, se dio cuenta.
- ¡Oye! ¡Parece que nos movemos!- Dijo mientras abría la compuerta del contenedor.
La luz del exterior le cegó por unos minutos, pudiendo ver apenas las sombras de todo un grupo de gente que estaba alrededor, parpadeó un par de veces y las sombras fueron tomando forma, hasta que pudo distinguir los rostros de sus perseguidores, incluyendo a la androide sexual, que le había robado todo lo que tenía. Al ver la reacción de miedo de Jay, todos estallaron en una tremenda.
- ¡¿Os lo habéis pasado bien?! ¿Era esto lo que buscabas Jamaica?
- ¡Oh! Ha estado a la altura.- Contestó la chica en tono divertido.
- ¡¿Qué significa esto?!¡¿Me habéis secuestrado?!- Preguntó Jay desconcertado.
- ¡No, claro que no! Te hemos reclutado. Ahora en cuanto os vistáis, que Jamaica te traiga a mi despacho para firmar.
- ¡Yo no pienso firmar nada, es más, exijo que me liberéis inmediatamente!
- Me parece bien. Traedle un traje espacial, para que pueda volver a la estación espacial.
- ¡¿Qué…?!
- Mira chaval, no tengo tiempo para tonterías, o firmas el contrato o te pones el traje espacial, tú elijes.
- Vamos cariño, ¿no tenías ganas de aventuras? Además, seguro que lo pasamos bien.- Dijo Jamaica.
- Está bien. Firmaré… Y tú, déjame en paz ¡Maldita lianta, hija de puta!- Dijo Jay, poniéndose los pantalones.
Una hora más tarde, Jay ya había firmado el contrato y mientras el Capitán, del Tortuga veloz enviaba una copia a la estación Ultima Frontera, Jamaica ayudó a Jay a instalarse en su camarote.


Jotacé